domingo, 26 de octubre de 2008

DesAfIo Y cOlaPsO

La tecnología ha hecho que el hombre llevé un ritmo de vida diferente al que solian llevar hace unas cuantas décadas. En la actualidad a una persona se le considera más saludable o más normal si en su vida cotidiana se ve rodeada de tecnología, en cambio, en épocas pasadas a la gente se le advertía que entre más lejos estuvieran de dicha tecnología más sanos estarían, como lo señala el texto con el ejemplo del señor que no desea usar los postes de madera porque desea conservar su corazón y su mente alejados de dichos artilurgios.
Pero tiempo después la tecnología se ve tan normal que el señor Hans Selye nos propone tratar de ver a la tecnología como una enfermedad. Suena un poco drástico señalar a ésta como un enfermedad, pero a la vez suena lógico el determinar así a la tecnología, ya que no se puede estar inmune a ninguna enfermedad y mucho menos a la del avance o retroceso (como se le desee ver) del cual no se sabe cuál es el principal lugar contaminado, pues por lo general los países desarrollados y en vías de desarrollo, serían los primeros a quienes se les agradecería por traer este tipo de virus u enfermedad. Como menciona el texto:
“Ninguna sociedad consiguió saber lo bastante acerca de sus acciones como para desarrollar inmunidad a sus nuevas extensiones o tecnologías”
Una alternativa que nos propone este texto para acabar con esta enfermedad llamada tecnología es contar con la presencia del arte. El arte puede definirse como la actividad mediante la cual el ser humano expresa tanto sus sentimientos como pensamientos, por lo que va en contra de la tecnología, que solo se encarga de hacer operaciones y procesos matemáticos sin la demostración de sentimientos ni pensamientos propios. Los artistas obtienen la siguiente definición mencionada en el texto:

“El artista es aquel que, en cualquier campo, científico o humanístico, capta las implicaciones de sus acciones y de los nuevos conocimientos de su tiempo. Es un hombre de conciencia integral.”

Desde mi punto de vista, el arte ni los artistas podrían ser considerados una cura para la tecnología ni para el entumecimiento que ésta provoca, ya que como se ha dicho anteriormente, una cosa no existe sin la presencia de otra, por ejemplo el hombre no existiría sin la presencia de otro que lo ayudara a destacar, en este caso, el artista no podría haber sido artista sin la existencia de la tecnología que le proporcionara pinceles o pintura para pintar, guitarras eléctricas para tocar, computadoras para escribir, barro para moldear, telas para la fabricación de ropa, etc.

Por lo contario, si creo en la posibilidad de que la tecnología nos ha golpeado duro, ya que sucede lo mismo cuando ocurre una experiencia intensa o que fue importante para ti, ya que tanto la experiencia como la tecnología te dejan una marca, a partir de la cual, la vida va a ser diferente y con el transcurso de este cambio se dejara una huella la cual, podrás aceptar para poderla hacer parte de tu vida o, rechazarla para seguir con tu normalidad.
También creó en la posibilidad de hacer responsable a la tecnología de la muy nula participación que los jóvenes tienen al hacerles la vida muy fácil, formando así lo que se llamará barrera, no permitiéndoles desenvolverse como se era esperado.

Y es así, que la tecnología dentro de una comunidad se vuelve tan básica que te acostumbras o te apartas, como un cojo o un ciego tienen que adaptarse a la sociedad. Poco a poco todo lo que antes se renegaba o de lo cual se rehuía por temor al cambio, se vuelve como lo menciona el libro: “indispensable para sus conquistadores”.

Como punto importante de la lectura, cabe destacar que hoy en día todos tenemos la necesidad de usar la tecnología no solo para hacernos la vida más fácil, sino por la simple razón de que todos necesitamos estar informados pues se ha vuelto una necesidad al igual que la tecnología.

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